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Háblame Señor, con un nombre: Agripina

Ahora mi nombre ya no es secreto,
Ganador es aquel que lucha legítimamente.
Reino celestial la meta es el cielo,
Interesado en la corona de vida?
Prepárate primero.
Importante oír la palabra viva y eficaz,
No te detengas; al arrepentimiento y conversión hay que llegar,
Así empieza el caminar, hacia la patria celestial.

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